La primavera es una época perfecta para casarse: buena temperatura, colores bonitos y todo el esplendor de las flores. Si además de esto decides celebrarlo en Mas les Lloses tienes muchos puntos a tu favor para que tu boda sea preciosa. Así lo decidieron y lo celebraron nuestros novios María y Óscar.

Una boda civil en plena primavera en Mas les Lloses.

Óscar nos recibió en la casa donde vive junto a María y Sunny para dejarnos conocer en detalle todos sus hobbies y poder disfrutar de las fotos de la pareja con su querida mascota. Con un gusto exquisito por los detalles y con ayuda de su familia vistió traje de Hugo Boss, camisa de Roberto Vicentti, corbata de Calvin Klein, zapatos de Roberto Ley, calcetines Hackett, gemelos de Versace y reloj  Hamilton.

En la casa familiar de María nos esperaba más revuelo, alboroto y un buen almuerzo antes de comenzar con los preparativos de la novia que con el mismo gusto por los detalles vistió Pronovias modelo Efigie, zapatos de Mascaró colección vintange, corona de flores y ramo Flores la Tartana y usó las joyas de la boda de su abuela Pepita. La peluquería y maquillaje la realizó Peluquería A Contrapel.

Fotografiados y filmados los novios nos dirigimos hacia Mas les Lloses donde un día radiante nos esperaba para documentar a los divertidos invitados, infinidad de detalles, el maravilloso espacio y la entrada a la ceremonia de Óscar junto a su madre y Sunny en ¡sidecar!

Atención a Sunny atento al beso de recién casados :)

Realizadas las fotos de la pareja en torno al espacio nos centramos en documentar una gran fiesta que comenzó con un divertido cocktail, banquete y muchas, muchas sorpresas como una charanga en plena comida así como el pedazo de baile que se marcó la pareja sorprendiendo y animando a todos los invitados a lanzarse a la pista de baile y alargar una tarde divertida y agradable.

Muchos nos preguntáis cuál es el mejor consejo para este día tan importante y nuestra respuesta siempre es y será la misma: nada mejor que disfrutar al máximo para que vuestra boda sea ¡increíble!